La época primaveral es uno de los momentos más valiosos en los viñedos, porque marcan el inicio de un nuevo ciclo vegetativo que culmina en la futura cosecha de uvas. De ahí que este período sea crucial, debido a que las cepas despiertan del letargo invernal y se preparan para un intenso proceso de crecimiento y desarrollo. lo cual requiere de un cuidado profesional para la obtención de vinos de excelente calidad en la D. O. Rueda. 

Te contamos más del por qué la primavera es tan relevante para la viticultura en los siguientes puntos: 

• El despertar de la vid: El renacer vegetativo es el primer acto de la época primaveral en los viñedos. Las suaves temperaturas y la mayor exposición solar despiertan las yemas (de las principales estructuras del crecimiento de las plantas), dando lugar a brotes y flores que adornan las vides. Este renacer es fundamental para el desarrollo de la planta y la producción de uvas de calidad.

• Labores de prevención: La primavera también es el momento de implementar importantes labores de prevención. La poda en verde es una práctica clave, donde se eliminan brotes no deseados para asegurar un equilibrio adecuado entre hojas y racimos. Además, se controlan las malas hierbas, evitando que compitan con las cepas por recursos esenciales como agua y minerales. La protección de las flores durante la floración es esencial para prevenir plagas e infecciones.

• Climatología y polinización: Aunque las lluvias primaverales son beneficiosas para el riego, también pueden aumentar el riesgo de enfermedades como el mildiu debido a la humedad. La atención a la climatología es crucial. Además, los polinizadores, como insectos y el viento, desempeñan un papel fundamental en este proceso, asegurando una futura cosecha exitosa.

• Floración y futura cosecha: La floración no solo ofrece un espectáculo visual impresionante en los viñedos, además es un indicador crucial del volumen de la cosecha y del tiempo aproximado de la vendimia. Cuidar meticulosamente las flores garantiza que se transformen en uvas de calidad en las semanas subsiguientes.

Así que la época primaveral en los viñedos es un tiempo de intenso trabajo que requiere de un buen cuidado. Este período, forma parte de la promesa que sienta las bases para la culminación de un grandioso ciclo del vino en la D. O. Rueda: desde la brotación de las primeras hojas hasta la esperada cosecha que corona el esfuerzo de todo un año.